Mitos absurdos sobre las relaciones sexuales 3 La masturbación

Las mujeres no se masturban (falso). Puede que lo hagan menos que los hombres, no es algo que se vaya contando. Que no se hable de ello, no implica su inexistencia. Es una forma de conocernos mejor, de obtener placer, de relajarse.

También se piensa que sólo se practica durante la adolescencia, generalizando a hombres y mujeres. Pero no, se practica durante toda la vida, dependiendo de nuestras circunstancias personales, habrá épocas en las que apenas se use y otras en las que si.
Es independiente a tener pareja, no significa que las relaciones con ella sean insatisfactorias. Es compatible. Incluso puede ser usada en las relaciones de pareja, para excitarla.

Masturbarse  está muy bien,
 pero follando conoces gente.
(Woody Allen)

Tampoco te deja ciego, te seca el cerebro, salen granos o te dejan estéril. Como hemos comentado en anteriores ocasiones, las Iglesia ha sido quien ha extendido esta idea para la represión y mejor manejo del “rebaño”. Nada que ver con la realidad

La masturbación es menos satisfactoria que el coito (falso). No tiene por qué. Sigue el mismo proceso que el coito. Se siente el mismo placer. Eso si, como diría Woody Allen, manteniendo relaciones sexuales con otra persona, conoces gente ;-).

También se ha dicho de ella que es compulsiva, que una vez que se empieza no se puede detener. ¡Ridículo!. Paralizaría nuestras vidas y habríamos muerto todos de hambre, o por falta de sueño. Igual que no estamos todo el día teniendo sexo con la pareja, comiendo, durmiendo, paseando…

No es un sustituto de las relaciones sexuales sino un complemento; disfrutar de uno mismo es positivo, siempre que eso no te aísle de todo lo que te rodea.

 Lo de la ceguera por onanismo siempre me ha resultado curioso. Más bien los ciegos son los que intentan no dejar ver a los demás.
  Pero es ponerle puertas al campo. Si el autoerotismo realmente fuera tan malo, las consultas de oftalmología estarían repletas.

Ventajas de la masturbación

 No hay que esforzarse en conseguirlas, son todas automáticas:

• Autosuficiencia: De todos es sabido que, si no tienes pareja, siempre lo puedes hacer con una joven germánica: la alemanita, es decir, ¡Ale, manita! (entiéndase manita como diminutivo de mano).
• Autonomía: relacionada con la de antes, otros autores la entienden como que puedes hacerlo en cualquier comunidad autónoma o distrito. Lo más importante es que no tienes que ponerte de acuerdo con nadie. No hay problemas de falta de deseo; si te apetece a tí, basta; y si no te apetece, pues te pones a leer tarzanyjane.com, que siempre aprendes algo y es otro gran placer sin efectos secundarios.
• Autofoco: Está enfocada en tí mismo (o autofoca si eres una chica autogorda). De tí para tí (o paraguayo si eres de Aunción).
• Autoestima: cultiva el Amor Propio. ¿quién te va a conocer mejor que tú mismo, quién va a saber mejor qué es lo que te gusta?
• Autoconocimiento: si en realidad no lo sabes, masturbándote, te conocerás mejor, y podrás informar a tu pareja de cómo llegar donde van los de Star Trek, es decir: "donde nadie había llegado jamás..."
• Autocontrol (también denominado AutoDurex): puedes practicar cómo retrasar lo inevitable o cómo alcanzar lo inalcanzable. Se cree que no tiene efecto en cuanto a perder un imperdible. Es decir, mejora la anorgasmia y la eyaculación precoz. La post-coz sólo sucede en episodios de zoofilia con cuadrúpedos.
• Autoridad: Tú tienes la última palabra sobre tu sexualidad. Nadie puede negarte tu propia satisfacción. Manténte firme (sobre todo si eres un hombre, lo contrario sería disfunción eréctil)
• Autocrítico: Puedes ponerte nota a tí mismo: esta vez me ha salido mejor o peor... nomínate: "And the winner is..."
• Autodidacta: Aprende por tí mismo. Y si no te gusta cómo va: auto "dí basta".
• Autómata: en vez de decir la típica frase: "Ay cariño, me estás matando"...  te puedes matar a tí mismo (de placer., claro, lo otro sería suicidio)
• Autoservicio: Es un vicio solitario, sin duda; pero además servido por uno mismo/a para sí mismo/a. ¡Oh/Ah!
• Autor: tú te lo guisas, tú te lo comes. Bueno, ésto último sólo si no tienes columna vertebral, de lo contrario, seguro que no te llegas con la boca hasta ahí...
• Autorretrato: puedes hacerte una foto en plena gallola y subirla al Facebook. Sólo ten cuidado que, en el fragor de la batalla, no te confundas de cuenta y la mandes a la de la parroquia. ¡Es especialmente peligroso si eres joven!
• Automóvil: no es necesario tenerlo para masturbarse: ¡basta ya de posturas raras, de columnas vertebrales torcidas y de inoportunos toques de claxon en el momento menos oportuno!
• Autopsia: si te pasas todo el día masturbándote, sin comer ni beber ni nada, al final, te mueres de inanición (y no precisamente por inacción).

En resumen:  Si te gusta el onanismo, pues tú mismo.

Os recordamos las otras entregas de esta serie sobre Mitos absurdos sobre el sexo:

1. Mitos sobre Embarazos y menstruación.
2. Mitos sobre sexualidad sucia, deseo excesivo, ninfomanía y satiriasis.
3. (éste artículo)
4. Mitos sobre los anticonceptivos.

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