Ya hemos publicado un artículo sobre los porcentajes de norteamericanos y norteamericanas que practicaban la masturbación a solas o en pareja, y otro sobre los que practicaban la penetración vaginal. Hoy nos dedicaremos a:
La Penetración Anal
Es lo que nosotros llamamos “el griego”, y no estamos seguros de cómo lo llamaban los antiguos habitantes de Grecia.
Lo que sí sabemos es que le damos este nombre porque a los espartanos, atenienses y otros helenos maduros les gustaban los jóvenes y bellos efebos, y a menudo preferían acostarse con mujeres para procrear, y con hombres para divertirse.
Otro sinónimo de la penetración anal es sodomía. Se debe a que se consideraba la práctica favorita de muchos habitantes de la bíblica ciudad de Sodoma.
Ese “terrible pecado” (según opinan los católicos) le costó una completa destrucción, incluyendo a toda su población, niños incluidos, a manos de unos furibundos ángeles enviados por el mismísimo y no menos furibundo Creador. Sí, ese tipo de barba blanca, el de la compasión y la piedad (¿?)
Pues los norteamericanos de esta nuestra época, entre invasión e invasión, aparte de joder al resto del mundo, también practican el sexo anal, si bien en mucha menor medida que el sexo vaginal u oral:
Penetrador anal (activo)
Llamaremos activo al hombre que penetra analmente a otro hombre o a una mujer. Entendemos que sólo el hombre puede penetrar a alguien, ya que la mujer no dispone de pene.
Sin embargo, sería interesante saber si hay muchas mujeres que, provistas de un consolador (y quizá un arnés), penetren a otras mujeres o a hombres.
Lamentablemente, esa información no venía en el estudio, no sé si por falta de imaginación de los encuestadores, o por la escasa relevancia estadística de tales prácticas.
En el gráfico podemos ver que esta práctica es minoritaria respecto a la masturbación o a la penetración vaginal.
Pero el número de hombres que la han practicado no es tan reducido como se podía pensar, y en toda la franja de edades desde 25 a 49 años podemos ver que los porcentajes superan el 20%.
Por otro lado, más del 10% de hombres de 20 a 24 años y los de 50 a 59 también han practicado el griego el año anterior.
Penetrado analmente (pasivo)
A diferencia del activo, un pasivo es el que recibe un pene en su ano, es decir, el que es penetrado.
Como es lógico, aquí no hay duda, y tanto hombres como mujeres pueden ser penetrados, por penes o juguetes sexuales):
Alrededor de un 20% de las mujeres americanas desde los 18 hasta los 39 años han sido penetradas analmente el año anterior. Las cuarentonas reducen el porcentaje al 12%.
Más curioso es comprobar que también han practicado sexo anal en torno al 5% de las más jóvenes (14-17) y las mayores (50-69).
¿Y los hombres? Es muy revelador ver la gran diferencia de porcentajes respecto a las mujeres:
Sólo un 4 ó 5% de los americanos hombres de 18 a 59 años han sido penetrados analmente el año anterior. El resto de edades no supera el 1%, salvo los de más de 70 años, que llegan al 2% ¿?
Supongo que podemos atribuir esta discrepancia al hecho de que la penetración anal de una mujer probablemente se practique más en relaciones heterosexuales (es penetrada por un hombre), mientras que la de un hombre sea más propia de las parejas homosexuales masculinas (gays).
El bajo porcentaje de varones homosexuales respecto al total de hombres(quizá no sea muy superior a ese 5% que comentábamos antes) impediría que esta práctica estuviera más difundida entre el conjunto de la población.
En todo caso, no olvidemos que, en contra de la creencia popular, la penetración anal no es la práctica más extendida entre parejas gays: el sexo oral es el que se lleva la palma.
Me ha sorprendido que haya ese 5% entre jóvenes de 14 a 17 años, puede que lo hagan por miedo a un embarazo o porque todavía no tienen claro qué agujero hay que usarse, ya que están empezando a tener relaciones sexuales.
Hace un tiempo leí una noticia que hablaba sobre las practicas sexuales de los homosexuales. Parecía que la creencia popular sobres sus posibles posturas favoritas, estaba bastante equivocada, practican más el sexo oral que la penetración. Como bien señala FerrDoktor.
Estos datos me resultan un tanto incompletos. Seria importante saber si repiten, si les gusta, si lo hacen por su pareja, si lo hacen por ellos mismos por experimentar otro tipo de sensaciones... creo que seria importante saber un poco más sobre esta practica, parece que siempre se quedan en preguntar si lo han hecho y cuantas veces.
Esperemos que en un futuro salga algún estudio que vaya un poquito más allá del "si lo has practicado en el ultimo año o no".
En este nuestro país (España) lo de "dar por culo" es una practica muy habitual, pero no en relaciones intimas, se da sobre todo en relaciones laborales, de los que están arriba y tienen el poder, sobre los que están abajo. Debe darles mucho gustito porque lo hacen muy a menudo y desde la nueva reforma laboral, todavía más.
Cuando visitamos la Boutique erótica, pudimos comprobar que tenían aparatos especiales para introducir por el ano, de lo cual se deduce que se usan, porque sino no se fabricarían, no?? Lo habéis probado?? cómo os fue?
Otros artículos sobre el Estudio de la Univ. de Indiana:
(no es necesario registro).
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