Historia de los juguetes sexuales

Seguramente muchos de los que nos leen piensan que los juguetes sexuales son un invento reciente, y que llegaron con los sex shop a finales del siglo XX.
Pero no, estamos muy muy equivocados. Este tipo de juguetes vienen desde un poquito más lejos. Exactamente desde hace 2.500 años. Hay datos arqueológicos con monumentos fálicos de la Edad de Bronce.

Griegos, romanos y egipcios construían falos con cera. En Grecia las solteras usaban unos hechos de madera, que lubricaban con aceite de oliva (el aceite no sólo es bueno para cocinar).
El dato más curioso nos lo da Oriente Medio, los fabricaban usando boñigas de caballo que después recubrían con resina. Curioso, verdad? y nosotros que pensábamos que lo habíamos inventado hace dos días :-).

Como no sólo se trata de hacer instrumentos con la forma de falo, los chinos se ataban un pañuelo de seda en la base del pene para tener una erección más duradera.
En las cuevas de Altamira y de Mesopotamia hay pinturas con representaciones fálicas.

La palabra Dildo (consolador) viene del italiano dildetto, que significa “complacer”.
En los rituales de la fertilidad siempre aparecen imágenes de una vagina, un pene o de un huevo.

El primer vibrador se usó como instrumento médico, en el siglo XIX. A finales de este siglo se diagnosticó una “epidemia” de histeria en las mujeres. Los antiguos médicos griegos describieron dicha enfermedad como “útero ardiente”. Cualquier comportamiento raro de una mujer, se consideraba que tenía esta enfermedad.
Lo más curioso de dicha historia sobre la histeria femenina, es que las mujeres iban al médico para ser tratadas y el médico lo que hacía era masajear el clítoris, hasta que llegaban al orgasmo. Esta práctica ha sido realizada y aceptada durante miles de años.

vibrador hi-tech

Mortimer Granville patentó un aparato electromecánico con forma fálica como instrumento terapéutico para efectuar el masaje que efectuaba el medico en su consulta.

Los primeros vibradores funcionaban con corriente eléctrica, baterías, pedal, turbina de agua, aire a presión o motor a gas.

A finales del siglo XIX existió un modelo “Chattanooga” que costaba doscientos dólares, un poco caro.

A principios del siglo XX empezaron a ser más pequeños y más asequibles . Fue el quinto articulo para el hogar en ser electrificado.

  ¡¡Vaya vaya cómo se las gastaban nuestros antepasados!!.

  Se han encontrado grabaciones de video de hombres prehistóricos con el siguiente diálogo:

• "Manolo, deja esas pinturas y dame vidilla...
• Quita, que estoy acabando la capilla Sixtina, toma éste hueso de buey y entreténte jugando con él." 

  Por motivos desconocidos, esa tribu acabó extinguiéndose...

  Como es lógico, tuvo que pasar la Edad de la Piedra, del Bronce y del Hierro, y no fue hasta la Edad de la Goma cuando se pudo inventar un dildo que no dañara los orificios corporales. Ya en la Edad del Látex aparecieron los actuales preservativos, como nos explicaba Ferr Doktor en Historia del preservativo.

  Es curioso que el vibrador fuera el 5º electrodoméstico: imagino que antes vino el frigorífico, la aspiradora, el lavavajillas, y la batidora. Los problemas que causaba esta última cuando se intentaba usar como estimulador llevaría  los científicos a desarrollar otro sistema menos agresivo.

  Otro artilugio que ha dado excelentes resultados es la botella de coca-cola. Y no me estoy refiriendo a la de 2 litros, ¡animales!. La estrella es, sin duda, la de 20 cl, con su forma tan característica, tan conocida en centros de salud cuando las pobres chicas iban a pedir que se las sacaran, tremendamente nerviosas (por la cafeína). Ver radiografía vaginal.

  Pero no sólo de cuerpos extraños vive el hombre (ni la mujer). Hablando de hospitales: la medicina siempre ha sido una disciplina importante; a menudo hay auténticas fiebres en TV sobre temas médicos.
  Series como "Urgencias", "Anatomía de Grey", "House" (y mucho antes, el Dr. Gannon), han llevado  auténticos ríos de aspirantes a las universidades de Medicina.
  Pero nada comparable a la explosión que se produjo en la época que nos describe Jane, cuando se utilizaba la masturbación para reducir los sofocos de las damas.  Eso era auténtica vocación. ¿Qué joven doctor sería capaz de dejar a esas mujeres con tal sufrimiento? ¡Juramento hipocrático obliga!  Aunque a uno le queda el resquemor de si más que Hipócrates, era un tema de Hipócritas...



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