Acabo de leer una noticia un tanto curiosa, sobre una sentencia de divorcio en la cual el marido tiene que pagar a su mujer más de 100.000 euros por realizar las tareas domésticas durante los 15 años de matrimonio.
Esta mujer, licenciada en derecho, se dedicó a dichas tareas, pero no explica si fue una decisión consensuada, imposición o el resultado de una búsqueda de trabajo infructuosa. El mercado laboral en España siempre (no sólo ahora por la crisis) ha sido desastroso, incluso teniendo estudios, el índice de paro ha sido siempre el más alto de Europa. Faltándome éste dato, no sé muy bien como posicionarme.
Las tareas del hogar son repetitivas, mecánicas, no hace falta ninguna preparación especial para saberlas hacer. Son muy poco agradecidas, ya que suelen pasar desapercibidas por aquellos que viven en la casa y no tienen costumbre de hacerlas… en fin, es un trabajo muy poco grato, pero que alguien tiene que hacer si no queremos que se nos coma la mierda.
Que se tenga en cuenta como trabajo, me parece bien. Pero entonces él debería pedir compensación por el trabajo realizado fuera de casa: el haber estado fuera todo el día y no haber podido disfrutar el hijo en común lo mismo que ella, ¿no?. Si no se mira la parte positiva de quedarse en casa y que alguien pase todo el día ganando las lentejas, habría que mirar también lo que supone para la otra persona dicha carga y responsabilidad. No sólo la casa y la familia son responsabilidades importantes.
Si el matrimonio se va a ver a partir de ahora como la reunión de dos personas, en el que ambos aportan un trabajo a dicha convivencia y que si no sale bien, hay que compensar a la mujer. Y digo yo que si luchamos por la igualdad también habrá que compensar al hombre. Lo que me da miedo es la forma de valorar el trabajo que realice cada uno de ellos. ¿Cómo lo van hacer, ¿van a crear unas tablas?
Vamos a tener sentencias machistas y feministas. Seguro que no habrá ni una sola que dé satisfacción a ambas partes. Ni siquiera a los espectadores que después leamos las noticias. Nos posicionaremos según nuestro sexo, que eso nos gusta mucho en este país, da lo mismo los argumentos, yo me junto con los míos/as y defiendo la postura por muy irracional que sea.
Si en esta noticia me añadieran que quedarse en casa no fue decisión de la mujer, sino imposición del marido y que encima se ha roto la pareja porque él se ha ido con otra, pensaría que la sentencia es más que justa, incluso se queda corta. Pero ¿pensaríamos lo mismo si hubiera sido decisión de la mujer y la ruptura viniera porque ella se ha ido con otro?
Si la justicia iba lenta, a partir de ahora ira más. Recurrir va a ponerse de moda.
Espinoso asunto, sin duda. Me llaman la atención algunos detalles:
¿Cuánto cuesta el trabajo doméstico?
Por un lado, el juez ha establecido el importe de la indemnización basándose en un hipotético sueldo como empleada de hogar, valorado en 600 € al mes, que ha multiplicado por el nº de meses que han compartido el matrimonio.
¿Ha incluido los meses de vacaciones, que quizá hayan pasado fuera de casa, incluso en un hotel con pensión completa y limpieza incluida en el precio?
¿Por qué 600€ al mes y no una cantidad mayor? ¿Cuál es el sueldo del juez? ¿Ha supuesto que era jornada completa de 8 horas al día? ¿Y los fines de semana y festivos... los ha incluido?
Claro, si uno de los cónyuges trabaja en casa y el otro fuera, ambos están contribuyendo a la manutención y el bienestar familiar, uno con dinero y otro con trabajo doméstico. Supongo que la separación de bienes le permite al que trabaja fuera ahorrar para sí mismo lo que sobre de su sueldo (siempre que no sea mileurista, en cuyo caso, sería imposible que le sobrara algo).
¿La separación de bienes implica corresponsabilidad con la casa y los hijos?
El matrimonio que se ha divorciado estaba acogido al régimen de separación de bienes, es decir, que cuando se disuelve, cada uno se queda no sólo con los bienes que tenía antes de la boda, sino también con los que ha adquirido durante el matrimonio (a diferencia del sistema de gananciales).Claro, si uno de los cónyuges trabaja en casa y el otro fuera, ambos están contribuyendo a la manutención y el bienestar familiar, uno con dinero y otro con trabajo doméstico. Supongo que la separación de bienes le permite al que trabaja fuera ahorrar para sí mismo lo que sobre de su sueldo (siempre que no sea mileurista, en cuyo caso, sería imposible que le sobrara algo).
El Código Civil español considera el trabajo doméstico como una contribución al matrimonio de separación de bienes, lo que puede ser reconocido con una pensión compensatoria en caso de divorcio (art. 1438 código civil). Y me parece justo, y una forma de reconocer una serie de tareas ingratas que a menudo el cónyuge no valora.
Esto sería imprescindible en caso de separación de bienes, pero seguramente también sea muy útil en régimen de gananciales.
Para que no haya problemas, este sueldo debería pagarse puntualmente cada mes, y no tras la separación. Entre otras cosas, porque así ambos serían más independientes económicamente desde el principio, y al que trabaja no le dejaría una enorme deuda cuando se rompa el matrimonio.
De este modo, y con todo especificado por escrito, no surgirían muchos de los problemas que causan graves disputas entre los ex-cónyuges.
Al final, todos acabaremos firmando acuerdos prematrimoniales, como los ricos XD ¿Habrá que especificar también el débito conyugal (la obligación de mantener relaciones sexuales con tu pareja?
Sueldo mensual para el cónyuge que trabaja en casa
Lo que me parece más justo es que, antes de la boda, los novios pacten ese sueldo y las condiciones laborales. Y que, por mor de la igualdad de género, pueda aplicarse a cualquiera de los dos cónyuges, dado que la inestabilidad laboral actual puede hacer que uno pierda su trabajo, y que, con suerte, su pareja pueda encontrar otro.Esto sería imprescindible en caso de separación de bienes, pero seguramente también sea muy útil en régimen de gananciales.
Para que no haya problemas, este sueldo debería pagarse puntualmente cada mes, y no tras la separación. Entre otras cosas, porque así ambos serían más independientes económicamente desde el principio, y al que trabaja no le dejaría una enorme deuda cuando se rompa el matrimonio.
De este modo, y con todo especificado por escrito, no surgirían muchos de los problemas que causan graves disputas entre los ex-cónyuges.
Al final, todos acabaremos firmando acuerdos prematrimoniales, como los ricos XD ¿Habrá que especificar también el débito conyugal (la obligación de mantener relaciones sexuales con tu pareja?
(no es necesario registro).
Lo mejor: cada uno en su casa y Dios en la de todos jajajaja
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