El tamaño de los Testículos sí que influye

"Sperm Wars" (1996),
de Robin Baker

  Continuamos con las impactantes afirmaciones de Robin Baker, el zoólogo autor del libro “Batallas en la cama” cuyas teorías sobre los espermatozoides asesinos ya hemos comentado anteriormente.

  En esta ocasión, vamos a tratar sobre si el tamaño importa. Pero no del pene, sino de los testículos. En la página 378 de su libro, afirma:

Como prueba un botón

“Los hombres tienen un par de testículos de tamaño desigual (como promedio, el derecho es un 55% más grande), que cuelgan del saco del escroto a diferentes alturas (lo más frecuente es que el izquierdo esté más bajo).”

  Es curioso que el testículo izquierdo esté más bajo, a pesar de que el derecho es más grande, y en principio, debería ser más pesado. Pero las diferencias en tamaño también existen entre unos varones y otros:

“En general, los hombres más altos y más pesados (pero no obesos) tienen testículos más grandes”.

  Pero después aclara que no siempre es así. Y para tranquilizar a los aspirantes a la paternidad, informa que os testículos pequeños también pueden producir una cantidad suficiente para fecundar si no hay guerra de espermatozoides.

  Y es que tener los testículos más grandes no sirve para chulear, pero:

“Los hombres que tienen os testículos más grandes fabrican más espermatozoides al día, eyaculan más a menudo e introducen más espermatozoides en cada coito.”

  Y en las guerras entre espermatozoides, el tamaño sí importa. Si tienes un ejército más grande, tendrás más cazadores de óvulos, más bloqueadores y más espermatozoides asesinos, lo que facilita mucho la victoria.

  Lo curioso es que, a pesar de fabricar más espermatozoides, los hombres de testículos grandes “[…] no eyaculan más espermatozoides cuando se masturban.”. Parece como si el cuerpo fuera suficientemente inteligente para, de un modo absolutamente inconsciente, saber si la eyaculación tiene o no posibilidades de alcanzar un óvulo.
  Este extraño concepto es habitual en las páginas de “Batallas en la cama”, pero sigue resultándome difícil de aceptar.

Prueba "real" para comprobar la
certeza de lo dicho en el artículo

  El tamaño de los testículos también afecta al comportamiento sexual del varón:

“Pasan menos tiempo con su compañera, y son más propensos a ser infieles y a elegir a una compañera que también sea infiel.”

  Es como si estos hombres confiaran tanto en la fuerza de su ventaja numérica que no les importa competir con los espermatozoides de otros. Baker afirma que lo anterior sucede justo al contrario en los hombres de testículos pequeños.

   Y no quiero dejar el tema sin la explicación de por qué los testículos no están dentro del cuerpo: 

“Cuando los hombres están desnudos, sus espermatozoides están almacenados a una temperatura que es 6 grados centígrados inferior a la que soportarían en el interior del cuerpo, pero cuando están vestidos, la diferencia es de sólo 3 grados.”

   La fertilidad se reduce mucho cuando el semen está a una temperatura mayor que la adecuada. De ahí que la naturaleza haya puestos los testículos fuera del cuerpo.

  Chicos, ya sabéis: si queréis tener niños y tenéis los huevos pequeños, tendréis que aseguraros de que vuestra chica os sea fiel. De lo contrario, tendréis un hijo, sí, pero no será vuestro.
  Es curioso que los hombres de testículos grandes no tengan miedo a la infidelidad: es que ¡van sobraos!

Ya que estamos hablando de testículos, no os perdáis las acepciones de la palabra cojones. ¡Tiene huevos!

Que un hombre más grande tenga los huevos más grandes es de cajón, de ahí el dicho "según es el santo, así son las cortinas". Rara vez se da el caso contrario y generalizo con todo.

Así que finalmente hay conexión entre los testículos y el cerebro, porque si un hombre con los huevos grandes piensa que puede buscar más compañeras en vez de quedarse con la que tiene, es que está pensando con los huevos y no con el cerebro.

Si alguien buscaba una prueba sobre qué parte usan los hombres para pensar, al menos en algunos aspectos de la vida, aquí la tiene.

Curioso que vayan por fuera para tener los espermatozoides fresquitos... y supongo que espabilaos para cuando los pongan en la rampa de salida, no??

Yo siempre pensé que si erais obra de Dios, que éste en su infinita sabudiria, habia cogido el trozo de barro, lo habia hecho una pelota, se habia puesto a cierta distancia y dado la vuelta lo habia tirado al buen tún tún y por eso los habia quedado ahí y así jajajajajja.

¿qué opinas tú? Comenta y lee los comentarios de otros lectores
(no es necesario registro).