Las parejas y la crisis económica

  Parece que la actual crisis económica no sólo afecta a la economía del hogar, afecta también a nuestras relaciones sociales y de pareja.

  Estar en paro, sin ver luz al final del túnel, termina pasándonos factura en todos los aspectos de nuestra vida. Nos sentimos inseguros, infelices y vivimos en una constante incertidumbre.

  Nos afecta en muchos aspectos, pérdidas de sueño, de ganas de comer, estamos de peor humor. Como no se puede gastar dinero, no salimos como antes, no hay viajes, ni salidas a cenar con los amigos.
  Las relaciones sociales en momentos así son mucho menores, nos movemos sólo en el entorno cerrado de nuestra casa, lo cual no ayuda mucho a mejorar el estado de ánimo.

  Evidentemente se producen más discusiones de pareja. No vas a reñir con quien no ves apenas, pero la persona que está cerca termina sufriendo nuestro mal humor, nuestras crisis y nuestras angustias. Por mucho que se trate evitar, o se sea consciente de ello, es complicado que no salga fuera de ti todo lo que te preocupa.

  Las relaciones sexuales escasean, la falta de deseo es una de las principales consecuencias de un estado de ánimo bajo, de esa baja autoestima que nos embarga con la pérdida del empleo y la escasas posibilidades de encontrar otro. Ni tienes ganas de comer, ni de hacer el amor.

  Por desgracia, no tengo ninguna fórmula mágica para solucionar estos problemas que surgen con la pérdida de un puesto de trabajo y la actual crisis económica. La única que se me ocurre es desearos que encontréis trabajo lo antes posible, teniendo seguridad económica, el resto vendrá rodado.

  Fuera de esta obvia solución, que ya sé que esta difícil, tenéis que intentar limar asperezas y no castigaros a vosotros mismos, y desde luego no castigar a quien vive con vosotros. Es complicado, pero con un poco de voluntad todos los días, seguramente lograréis que no se lleguen a producir muchas broncas.

  Si la economía doméstica va mal, y eso afecta negativamente a la calidad de la relación de pareja, ¿qué le queda a los parados y a los que pasan dificultades?

Consecuencias del paro en la pareja

  Parece que no es posible "ser feliz en la casa del pobre"; además de las preocupaciones por cómo llegar a fin de mes, se unen las actitudes negativas ante la vida y ante la pareja, las discusiones y las situaciones desagradables.

Un sistema económico que no permite ganarse la
vida a sus ciudadanos es una sociedad enferma.

  Y encima, disminuye el deseo sexual, con lo que el vínculo del placer también desaparece y por tanto, es más fácil discutir con el otro. Los parados no sólo se sientes fuera del mercado laboral, y pueden albergar sentimientos del tipo "no me quieren contratar, así que debo ser inútil", "no valgo para nada",

 Ya hemos comentado el estudio que mostraba cómo la crisis empeora la relación sexual, la depresión y la ansiedad son acompañantes no deseados del trabajador parado, y la irritabilidad aumenta.

  Uno de los principales apoyos (quizá los únicos) que tiene una persona que pasa por una situación económica difícil es la familia y las amistades. Por eso, cuando tu pareja parece estar siempre pegándose contigo, y no encuentras la comprension y la complicidad que necesitas, tu escaso ánimo y voluntad va a peor. Es precisamente lo último que necesitas para salir de la depresión y encarar la vida con determinación.

Solución: estar activo

  "Si haces lo mismo que hasta ahora, obtendrás los mismos resultados"; es una de las frases preferidas de los psicólogos orientadores en búsqueda de empleo. Aunque muchos trabajadores hacían bien su trabajo, han sido despedidos por causas externas a su voluntad y a su control.

  Sin embargo, una vez en esta nueva situación, el esfuerzo y el ánimo son fundamentales para afrontar el desolador panorama de la crisis. Quedarse en casa sumiéndose en la desesperación y autocompadeciéndose no va a solucionar nada.

  Todos somos valiosos, cada uno tiene sus propias fortalezas y habilidades que puede explotar para mejorar su situación. El paro y la crisis no son plagas bíblicas, y la única forma de combatirlos es, paradójicamente, a base de trabajo. El desempleado no debe estar parado, sino buscando empleo y mejorando su formación. Una de las preguntas más habituales en una entrevista de trabajo es: "¿cómo ha aprovechado el tiempo mientras estaba sin empleo?".

  Y mientras llega la oportunidad, es fundamental permanecer activo/a: existen multitud de asociaciones sin ánimo de lucro, ONGs, movimientos sociales, de barrio, etc, donde tu experiencia académica y profesional resultará de gran utilidad. También puedes involucrarte en el movimiento 15M, donde encontrarás muchos ciudadanos indignados como tú y comprometidos en cambiar la sociedad.

  Aunque no consigas un empleo remunerado, al menos estarás en marcha, no tendrás tanto tiempo para darle vueltas a lo mal que está tu economía, y harás algo positivo para la sociedad.

Sexo, cariño, afecto y hormonas

  Y en la esfera doméstica, apóyate en tu pareja y en tu familia. No son tus enemigos ni los culpables de la situación, sino los que más se preocupan por tí y desean que estés bien. No les quemes con tu mal humor, o te quedarás aún más solo/a.

  Cuéntales cómo te sientes, y expónles tus iniciativas para intentar mejorar las cosas. Puedes tomarte un momento de respiro de vez en cuando, pero no olvides que "el movimiento se demuestra andando" y que tú debes ser el principal responsable e impulsor del cambio.

  Has perdido tu empleo, o tras terminar tus estudios, no has llegado a encontrarlo. Si tu desánimo te hace perder además tu relación de pareja y todo lo bueno que te aporta, mal negocio estás haciendo.

Quema colesterol besando a tu pareja.
Es gratis y muy placentero.

  Cuando estás deprimid@, con ansiedad y desanimad@, recuerda que el cariño, los besos, las caricias y los orgasmos son gratis y te aportan las sensaciones positivas, tanto físicas como emocionales, que tanto necesitas. Tu cuerpo y tu mente lo agradecerán: es mejor la oxitocina que el prozac.



  El éxito no está garantizado, pero tu actitud es la clave para estar en la mejor disposición cuando llegue tu oportunidad.



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