En Nombre de la Moral, de Asfalto

tarzan-dice  En 1979, España estaba saliendo de la sangrienta dictadura del general Franco, y comenzaba a respirar aires de libertad y democracia.
  Era el momento de hacer borrón y cuenta nueva de 40 años de represión, no sólo política, sino también sexual.

  Por otro lado, el cine español tuvo una explosión de “culos y tetas” en la corriente (de ínfima calidad) que se denominó “destape”, una fuerte reacción a la extrema carencia de centímetros de carne en las pantallas y en el escenario artístico del país. Algún día tendremos que hablar de este fenómeno “artístico”.

Asfalto: L.P. Ahora

asfalto-ahora-portada-lp

  Algunos grupos musicales quisieron poner banda sonora a este sentimiento de liberación y esperanza en el futuro.  Una de las bandas que lideraron ese empeño fueron el grupo Asfalto.
  El rock urbano iba más allá del punk y de la posterior “movida madrileña”. A un notable virtuosismo musical, se unía el mismo deseo de contar algo importante que define a los cantautores.

  El L.P. ¡¡Ahora!!, con dobles admiraciones, muestra desde su portada el firme propósito de aprovechar la oportunidad, de tomar esa llave que nos ofrecía el nuevo régimen democrático, y que nos permitiría expresarnos libremente, sin tabúes y sin cortapisas.
  Se trataba de superar una etapa de oscurantismo, de fanatismo religioso, de hipocresía moral, de mediocridad social y de represión en todos los niveles.

En Nombre de la Moral: la música

  El tema comienza con unos pasos y unas risas. Continúa con un teclado suave, y unos cristalinos arpegios de guitarra acústica.
  Enseguida entra el bajo, la voz de Julio, y el órgano, en un delicado medio tiempo. Los solos de sintetizador, suaves y deliciosos, interpretados por el teclista uruguayo Jorge Banegas, aportan dulzura.

  Los coros femeninos del final, que momentáneamente recuerdan a The Dark Side of  The Moon (La Cara Oculta de la Luna), de Pink Floyd, convierten esa parte de la canción en un himno, y fueron realizados por Vicky y Luisi, que después formarían el grupo “Las Supremas de Móstoles”, más conocidas popularmente como las autoras del lúdico tema “Eres un enfermo” (del cibersexo), que también comentamos en el blog.

En Nombre de la Moral: letra

asfalto-nada-nombre-moral-single  Compuesta por Jorge G. Banegas y Julio Castejón, formó parte de su L.P. Ahora (1979), y apareció como cara B del single “Nada”.
  La letra expone la situación de represión sexual que se vivió en la dictadura católico fascista de Franco.

  Esa obsexión de la iglesia católica, que hemos comentado a menudo en el blog, era mucho más pronunciada en aquella época, si bien aún hoy en día sigue engañando con su desinformación acerca de los preservativos, entre otros temas.
  Una insoportable injerencia en la intimidad sexual que impedía “defender lo que sólo era nuestro”, algo que debería ser libre entre adultos con mutuo consentimiento.

  La suave voz de Julio va nombrando el voyeurismo, las fantasías sexuales, la masturbación, el pecado…
  Me gusta especialmente la frase “¡cuántos bellos momentos debieron acabar, como era natural, en la cama!”. No se trata de obligarse a practicar sexo en cada cita, pero hay ocasiones en las que el cariño, los besos, los abrazos y la pasión conducen lógicamente hacia la necesidad de mayor contacto físico.

Videoclip de En Nombre de la Moral

  Como no hemos encontrado este video en Internet, hemos tenido que preparar un montaje nosotros mismos, a pesar de tener casi nula experiencia en videoedición. Espero que os guste:
En Nombre de la Moral (1979), por Asfalto (compuesto por Julio Castejón y Jorge G. Banegas)


En Nombre de la Moral, de Asfalto
A veces pienso:
¿Qué estuve haciendo tanto tiempo,
sentado entre papeles,
rodeado de gris?
Esperando ese momento
que no tiene nunca tiempo.
Y siempre nada como único fin.

Con la mirada fija
en las secretarias,
con una obsesión
que va mucho mas allá
de lo sexual… ¡todos los días!

Nos tocó vivir un tiempo
en que todo era pecado,
!!qué tontería!!
Y como única salida,
construir tu fantasía
como siempre, en el lavabo.
Imaginando que unos brazos te rodeaban
mientras tú te dejabas llevar.
Y nada tenia que ver con la realidad

¡Qué de cosas nos robaron
sin poder hacer nada
por defender
lo que sólo era nuestro!.
¿Cuántos bellos momentos
debieron acabar
como era natural
en la cama?

Maldita tijera
que en nombre de la moral
nos hiciste tanto daño.
Y estuvimos soportando
hasta el final
hasta el final
hasta el final




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